musica

sábado, 22 de febrero de 2014

Capitulos de Maratom

ULTIMOS CAPITULOS!!!

CAPITULO # 68

Al día siguiente tuve que viajar a Chicago a una convención que duraría tres días, así que sólo estuve en contacto con ella por el celular, cuando tenía tiempo libre le mandaba mensaje o le llamaba, empecé a notar algo extraño en el tono de su voz, pero cuando le pregunté me aseguró que no tenía nada, que sólo estaba atiborrada de trabajo, quizá estaba siendo yo demasiado aprensivo y haciendo personal algo que no lo era.

Cuando regresé de viaje, fui a mi departamento a dejar la maleta y ducharme, al bajar por mi auto al estacionamiento, vi que una pareja estaba dentro de otro besándose y acariciándose acaloradamente, solté una risita porque saltaron cuando escucharon que quité la alarma de mi carro, así que subí y me dirigí al departamento de ___.

Me recibió con un gran abrazo y su aroma inundo de golpe mis fosas nasales que aunado a la escena que acababa de presenciar provocaron que las ganas de hacerla mía se incrementaran considerablemente, así que no puede aguantar más y terminé haciéndoselo de forma presurosa en el sillón.

Después comenzamos a cenar y le fui platicando sobre la convención, en la cual, me había encontrado a Sebastián, que iba del brazo de una hermosa rubia a la que me presentó como su novia.

Noté que ___estaba como ausente, de hecho apenas y había probado bocado y eso que yo era el que estaba hablando, por lo que le pregunté en que pensaba y me respondió que en nosotros para luego preguntarme qué era lo que había extrañado de ella y después que le respondí empezó a contarme la historia de su amiga Victoria que había conocido a su ex esposo en condiciones parecidas a las que nos conocimos ___ y yo, francamente no entendía adónde quería llegar con eso y me quedé sorprendido cuando me dijo que no quería que nos pasara lo mismo que a ellos, que nosotros no nos conocíamos y que ni siquiera sabía cuál era mi color favorito, se lo dije aunque seguía sin comprender cuál era el punto de todo eso, ¿acaso ese dato es trascendental para amar y estar con una persona?

No di crédito cuando me preguntó sobre Noelia y no es que quisiera ocultárselo, algún día se lo contaría, cuando me sintiera listo para hacerlo, no es algo que platique con frecuencia, a decir verdad, sólo lo he contado una vez, pero Caroline tenía que adelantárseme y encima contarle lo mal que me había puesto, al menos había servido para que terminara de corroborar que entre Julieta y yo sólo hay una gran amistad.

Y casi me caigo de la silla cuando me preguntó que si lo que nos unía era amor o sólo sexo, no me imaginé que se cuestionara algo así, ahora entendía el porqué de su tono de voz cuando hablamos mientras yo estaba en Chicago.

–___, ¿cómo puedes preguntarme eso?, te he dicho que te amo, te lo he demostrado y no sólo acostándome contigo, te he llevado con mi familia, ¿cómo puedes dudar si es amor? – era completamente inaudito que me cuestionara eso, con todas las locuras que había hecho por ella, claro que algunas las ignoraba.
– Porque lo primero que hicimos ahora que regresaste fue tener relaciones, ¿eso es lo que extrañabas de mí?, la mayor parte de tu lista son cosas físicas.
– Por supuesto que no, ___, en verdad no entiendo a que viene todo esto.
– A que debemos descubrir si este amor es auténtico o sólo es algo físico.
– Ok, entiendo tus dudas por la forma en que nos conocimos, pero hasta ahora sólo me has cuestionado a mí, ahora yo te volteó la pregunta, ¿qué fue lo que tu extrañaste de mí durante mi ausencia?
– Muchas cosas, tu voz, tu mirada, tu sonrisa, tus besos, tus caricias, tus palabras.
– ¿Tienes dudas de amarme? – pregunté con miedo, tal vez esa era la razón de sus argumentos.
– No es eso, simplemente hemos basado nuestra relación en la pasión, recuerda la nota que me dejaste un día, la vida es un equilibrio y eso es precisamente lo que estoy buscando, que realmente nuestra relación sea equilibrada y no sólo física.
– ¿Y entonces qué propones para descubrirlo?

No estaba preparado para escuchar su respuesta, me dijo que así como una vez yo le impuse unas reglas, ahora era su turno de hacerlo y empezó a dictármelas.

– Regla número uno: no mentiras ni engaños – sonaba lógico, había algunas cosas difíciles de confesar, pero se las diría – regla número dos: no arranques de celos – sonaba más lógico aún y con toda la razón – regla número tres, la más importante… no sexo durante un tiempo, quizá un par de meses.
– ¿Qué?, ¿no sexo? – exclamé sin comprender que pretendía con eso.

Me argumentó que si nos amábamos podríamos soportarlo, ¿acaso no habíamos soportado el tiempo que estuve en Londres?, ok, lo hacíamos a través de la web cam, pero no es lo mismo, aguantamos los días de su período, ¿cómo podía decirme que esa sería la prueba máxima para determinar nuestra relación? Le hice saber que no me imaginaba que fuera tan influenciable y su respuesta fue que no quería volver a vivir una mentira como con Zayn, que esas serían las reglas del juego, que si las aceptaba.

– Es un poco extremo ___, pero para que veas cuanto me importas y no sólo por el sexo, acepto, es más te propongo algo que realizaremos en lugar de hacer el amor, porque hace muchísimo tiempo que eso es lo que hago contigo, no es simple sexo – le aclaré.
– ¿Y cuál sería esa proposición? – preguntó mirándome fijamente.
– Te voy a contar mi historia, un poco cada noche, para disipar tus dudas, para que me conozcas y seguiré las reglas, tal cual, no quieres mentiras, perfecto, de hoy en adelante sólo la verdad, pero de tu parte también, porque no me dijiste que Caroline te había platicado sobre Noelia , no quieres arranques de celos, los controlaré, no quieres sexo y en su lugar prefieres que salgamos como dos adolescentes, lo haremos, porque entiendo tus argumentos y comprendo que estés asustada por la forma en que terminó tu relación con Zayn y por lo que le pasó a tu amiga, pero ni tú eres ella ni yo soy él.
– Lo sé, no me estoy comparando con ellos, pero vi tan devastada a Victoria que no quiero pasar por lo mismo y sí, también tiene que ver con la manera en que terminaron las cosas con Zayn, no quiero que se repita la historia y la verdad sí me asusta que lo nuestro no tenga un final feliz, por eso las nuevas reglas, es mejor saber ahora lo que realmente nos une que después cuando haya pasado más tiempo y nos arrepintamos.
– Yo jamás me arrepentiré de haberte conocido, sin importar las circunstancias, quizá esa era la única forma en que hubiéramos coincidido en la vida, entonces, ¿estás dispuesta a escuchar todo lo que tenga que contarte?
– Sí… pero no quiero detalles sórdidos.
– Está bien, esos los reservaré para mí.
– Ok, te escucho.

CAPITULO # 69

Y así empecé a contarle mi historia, sus reacciones fueron diversas; de tristeza y pena cuando le conté lo de Noelia, incluso se le llenaron sus ojos de lágrimas, ahí fue cuando comprendí la forma en que me había abrazado en Miami, seguro Caroline acababa de platicarle ese episodio.

Pasó a la sorpresa y molestia cuando le aclaré la forma en que había entrado a esa sociedad. Se quedóboquiabierta cuando le fui explicando lo que me hacía sentir, no daba crédito a lo rápido que yo había roto las reglas, incluso mucho antes que ella. Se quedó impactada al enterarse que la había mandado investigar y su rostro expresó miedo y confusión.

– No puedo creerlo Tom, ¿fuiste capaz de mandarme investigar?
– Sí, sé que fue algo indebido, pero no encontré otra forma de averiguar sobre ti.
– Si ya habías roto las reglas, ¿no era más fácil hablarlo conmigo?, decirme lo que pasaba por tu mente y preguntarme lo que quisieras saber de mí.
– Sí lo era, sé que fue incorrecto recurrir a eso, pero, fue lo único que se me ocurrió y cuando decidí romper las reglas y buscarte, te vi con Zayn.
– ¿Ahora es mi culpa? – exclamó cruzándose de brazos.
– No estoy diciendo eso___, debes creerme cuando te digo que no sabía que me estaba enamorando, sólo tenía claro que quería conocer todo sobre ti y no tenía idea como manejarlo, ___, la primera vez que me enamoré tenía catorce años, fue un romance juvenil que terminó en tragedia y no se compara con lo que ahora siento por ti, ni siquiera estaba consciente que lo que sentí fueron celos cuando te vi con Zayn la primera ocasión, no he tenido citas convencionales con nadie y quizá no sea suficiente para que me entiendas, pero mi único argumento es que te amo, aunque lo dudes.
– Tal vez es un amor enfermizo Tom, perdóname por no entenderte, pero si tus arranques de celos ya me habían dado miedo, ahora que sé que me investigaste, ese miedo aumentó y… no sé si pueda estar contigo.
– ¿Qué?, ni siquiera he terminado de contarte toda mis historias.
– Por el momento no necesito saber más, permitiste que un extraño me siguiera, que me tomaran fotos, que averiguaran hasta que flores me gustan, ¿cómo pretendes que siga a tu lado después de saber eso?
– Por nuestro amor ___, sé muy bien que actué como un psicópata y créeme que haría las cosas diferentes si el tiempo regresara, pero, no sabía si yo significaba algo para ti.
– ¿Y cómo ibas a saberlo si no me lo preguntaste?, yo tenía la misma incertidumbre que tú, no me habías dado ningún indicio, hemos vivido esta relación a base de apariencias, de mentiras y es precisamente lo que no quiero.
– ¿No me amas ___? – la tomé de las manos – mírame a los ojos y dime que no me amas y entonces me alejaré para siempre.
– Ese no es el punto Tom, sí te amo, pero estoy asustada, necesito unos días para procesar esta información, ¿ok?
– ¿Entonces no es definitiva tu decisión? – pregunté con el corazón en la mano examinando sus ojos.
– Aún no, tienes razón en decirme que te faltan cosas por contarme, pero, por ahora no quiero escucharlas, necesito estar sola.
– Está bien, si así lo deseas, lo comprendo, sólo ten presente que aunque nuestros primeros encuentros hayan sido sexuales, eso no es lo que me une a ti, sí me encanta la forma en la que hacemos el amor, porque grábatelo bien, hacemos el amor, no es sexo lo que tenemos y te pido perdón por mis conductas irracionales, de verdad lamento mucho haberte mandado investigar, haberte espiado… sólo recuerda muy bien que te amo, tómalo en cuenta para cualquier decisión.
– Lo haré porque yo siento lo mismo por ti, después te llamo.
– ¿Cuándo? – pregunté desesperado.
– No lo sé, cuando me sienta lista para volver a escucharte, tal vez en una semana.
– Está bien, esperaré – le di un beso en la frente y me fui de su departamento.

Sabía que eso era lo más difícil que me perdonara, casi todo lo demás ya lo sabía, excepto algunas mentiras derivadas para ocultar la investigación. No podía culparla por sentir miedo, francamente yo lo había sentido por mí mismo y por todo lo que estaba haciendo por ella, su reacción era lógica, sólo esperaba que su amor fuera más grande y pudiera perdonarme, no podía imaginar mi vida sin ella, ¿qué haría?, ¿adónde iría?, ya ni siquiera me llamaba la atención ser un mujeriego, ya estaba harto de eso. Frustrado llegué a mi departamento y Julieta estaba ahí.

– Que carita, ¿qué te pasó? – exclamó al verme entrar cabizbajo.
–____ me pidió tiempo para pensar y analizar las cosas.
– ¿Sigue con la duda del amor o sexo?
– Tal vez, creo que aún no le cuento lo suficiente para que sé de cuenta que es amor.
– ¿Y por qué te pidió tiempo? – preguntó curiosa.
– Porque le confesé que la mandé investigar y se asustó.
– ¿Qué?, no puedo creerlo – exclamó sorprendida.
– No me mires así, tú hiciste lo mismo con tu exnovio, ¿no?
– Sí, pero jamás me imaginé que tú lo hicieras, a mí también me has ocultado muchas cosas de esa relación, ¿eh?
– Pues ya estamos iguales, tú también me has estado ocultando con quien sales últimamente.
– Ya suficiente tienes con lo que estás pasando con ___ para que yo te dé otra preocupación.
– ¿Pues de quién se trata?, ¿lo conozco?
– Te lo contaré en su debido momento, por ahora tienes cosas más importantes que resolver, yo sé cuidarme sola, así que tranquilo.
– Claro, si has convivido con este psicópata por tantos años y sigues a salvo, no tengo de que preocuparme, no creo que te encuentres a alguien más loco que yo.
– En efecto no – se rió moviendo la cabeza – además no has sido psicópata toda la vida, fue a partir de que te enamoraste de___.
– Espero que ella lo vea así, que todo ha sido locura de amor.
– Verás que sí, ___también te ama, en la boda de Caroline no sé quiénes derramaban más miel, si ella y Dylan o tú y ___.
– Pero, ¿crees que me perdone lo de la investigación y las mentiras que le he dicho?
– Yo digo que sí, pero en el supuesto caso que no lo hiciera y terminara definitivamente contigo, al menos ya sabes que eres capaz de enamorarte, de abrir tu corazón.
– No sé si pudiera hacerlo de nuevo, fue casual Julieta, no es algo que yo hubiera buscado.
– El amor siempre es casual Tom, llega en el momento preciso y si no fuera con ___, en algún lado estará tu alma gemela, yo pensaba que él era la mía y ya ves, me equivoque y ahora… la vida me ha dado otra oportunidad.
– Yo no quiero otra oportunidad si no es con ___.
– No seas dramático Tom, verás que sí te perdona.
– Estoy muy mal, ¿verdad?
– Sí mi amigo – soltó una carcajada – pero el amor así nos pone.
– Julieta, ¿estás enamorada? – dije mirándola fijamente.
– Tal vez – respondió con una sonrisa mirando al vacío.
– ¿No me vas a decir de quién?, soy tu mejor amigo.
– No, ya te dije que a su debido tiempo.
– ¿Andas con un casado?
– Por supuesto que no, te prometo que cuando las cosas se resuelvan entre ___ y tú, organizo una salida para que… convivamos los cuatro.
– Que misteriosa.
– Bueno, ya me tengo que ir, sólo vine por unas cosas que se me habían olvidado, nos vemos luego – me dio un beso en la mejilla y se fue.

Pasó una semana completa y ___ no me buscó, respeté su decisión y aunque me estaba muriendo por verla, yo tampoco la busqué. Todas las noches me dormía con su pañoleta y debía reconocer que algunas veces me acariciaba pensando en ella, eso no me lo había prohibido, así que no estaba rompiendo ninguna regla. El siguiente lunes finalmente me llamó y no pude evitar sonreír al reconocer su número.

– Hola corazón, ¿cómo estás? – fue lo primero que le dije.
– Bien gracias, ¿y tú? – respondió en tono casual.
– Extrañándote, me da tanto gusto escuchar tu voz.
– Quizá no te dé el mismo gusto lo que tengo que decirte – dijo seria y mi corazón empezó a latir descontrolado por la zozobra. 

No pude decir palabra alguna por la impresión que me causó lo que me dijo, en un instante pasaron varias posibilidades por mi cabeza, sólo una lo suficientemente poderosa que no me daría gusto escuchar, que terminaría conmigo definitivamente.

–Tom, ¿sigues ahí? – exclamó haciéndome reaccionar.
– Sí… te escucho.
– Zayn ya se enteró de lo nuestro.

Otra vez me quedé en silencio tratando de procesar lo que acababa de decirme, nada que ver con lo que yo había pensado, ni siquiera me acordaba de la existencia de ese tipo.

– ¿Me escuchaste? – preguntó insegura.
– Sí… pensé que ibas a decirme algo grave – le aclaré y me volvió el alma al cuerpo.
– ¿Cómo qué?
– Que no me perdonabas y ya no querías saber nada de mí.
– Bueno… aún no decido eso, sólo quise comentarte que él ya lo sabe.
– ¿Y tú cómo sabes eso?
– Porque anoche coincidimos casualmente en un evento de mi trabajo y me lo dijo.
– ¿Y cómo se enteró?, ¿te lo reprochó?
–Olivia le mandó la foto de un periódico donde salimos juntos en la boda de Caroline, pero no me reprochó nada, ya está saliendo con… otra chica, sólo me preguntó que desde cuándo y cómo se había dado lo nuestro y luego me comentó que ya habías prescindido de sus servicios, algo que no me habías dicho, por cierto.
– Aún no llego a esa parte de la historia… ¿ya estás lista para seguirme escuchando?
– Sí, pero tendrá que esperar unos días, va a ser el aniversario de la agencia y estoy en el comité organizador de la fiesta, así que estoy hasta el tope de trabajo.
– Entiendo, no te preocupes – dije resignado.
– ¿Quieres acompañarme a la fiesta?
– ¿Tú quieres que te acompañe?
– ¿Crees que te lo preguntaría si no lo quisiera?
– ¿Otra vez vamos a respondernos con preguntas?
– Tú empezaste – exclamó riéndose – ¿sabes?… te he extrañado mucho.
– Yo también ____, no tienes idea de cuanta falta me haces, te amo.
– Yo también Tom– suspiró – debo estar loca, pero no me importa que seas un psicópata, no tengo nada que perdonarte, te amo y te necesito.
– ¿Podemos vernos más tarde? – pregunté con el corazón latiéndome descontroladamente por sus palabras – paso por ti a la oficina y vamos a cenar.
– Está bien, aunque no puedo desvelarme mucho, mañana tengo que estar a las ocho de la mañana en Nueva York.
– Yo te llevo, si quieres… me puedo quedar a dormir en tu departamento.
– Ya no soportas la tercera regla, ¿verdad? – exclamó con una risita.
– Apenas van trece días, aguanté un mes en Londres, así que aún puedo soportar más.
– No puedo creer que los estés contando, corrijo, sí puedo creerlo, me estoy dando cuenta que eres capaz de muchas cosas.
– Todas por amor___, no sé cómo puedes dudarlo.
– Sólo quiero estar completamente segura, no quiero otro desengaño.
– Te entiendo, ¿entonces a qué hora paso por ti?
– No sé a qué hora salga, te mando mensaje, ¿sí?
– Ok, lo esperaré.
– Hasta la noche, te mando un beso.
– Y yo cien.

Escuché que se rió y después colgó. Suspiré y luego me reí solo, no sé si lo había hecho con alevosía y ventaja, pero definitivamente había logrado meterme un buen susto con esa frase de que no me daría gusto lo que me diría, francamente me tenía sin cuidado que lo supiera ese tipo, lo único que me importaba es que no quisiera hacerle daño a mi___, pero si no le recriminó seguro es porque no le importó enterarse, además él también ya estaba haciendo su vida con otra persona.

A las 8:30 me mandó mensaje ___ para que pasara por ella, así que salí de mi departamento y me dirigí a su oficina, la esperé afuera del edificio y de inmediato salió cuando le avisé que ya había llegado, me saludó con un rápido beso en los labios y fuimos a un restaurante cercano. Ordenamos la cena y mientras estuvimos ahí le conté otro episodio de mi historia, vi como paso de la rabia a la risa y de nuevo al enojo cuando escuchó lo que le platiqué.

– Yo pensé que habías conocido a Zayn por casualidad, jamás me imaginé que lo habías contactado a propósito – exclamó cruzándose de brazos.
– Quería conocerlo, saber si era un fuerte rival.
– ¿Así que desde un principio supiste que me engañaba? – preguntó seria.
– Sí y eso fue lo que me motivó a seguir contigo.
– O sea que si no me hubiera engañado, ¿te habrías alejado de mí?
– No lo sé, probablemente no.
– Esculcaste su celular, sí que eres un psicópata.
– Estoy consciente de ello – acepté avergonzado.
– Jamás me imaginé que alguien hiciera ese tipo de cosas por mí.
– Para que veas cuán grande es mi amor por ti – respondí y la besé en los labios.

CAPITULO # 70

Minutos más tarde nos dirigimos a su departamento, accedió a que me quedara a dormir con ella, así que estacioné el auto y subimos. Ambos nos pusimos la pijama, tanto en su departamento como en el mío había ropa de los dos, luego nos acostamos, era la primera vez que dormiríamos juntos después de las nuevas reglas y sería un reto grande el no tocarla, así que le di la espalda y abracé la almohada.

No sé cuánto tiempo pasó, no podía dormir teniéndola al lado y sabiendo que no podía hacerla mía, claro que había sido mi idea quedarme a dormir con ella. De pronto sentí su mano acariciar mi abdomen y apreté la almohada, comenzó a besarme el cuello, ¿estaba dispuesta a romper su propia regla?, mi miembro empezó a reaccionar a sus caricias y sus besos, ¿me estaba tentando a propósito? Me volteé y se me quedó viendo, analizándome, acaricié su cabeza y se inclinó para besarme apasionadamente, le correspondí unos instantes y luego subió en mí, definitivamente me estaba torturando, pero no estaba dispuesto a caer en su juego, ella había sido la que había pedido que no hiciéramos el amor y ahora se tenía que apegar a su dichosa regla. Tuve que recurrir a recuerdos desagradables de mi vida con tal de reunir todo mi autocontrol y rechazarla.

–____, detente – dije con un hilo de voz tomándola de los hombros y separándola.
– ¿Por qué?, no me digas que no fue esta la razón para quedarte hoy aquí.
– No, fue para llevarte temprano a Nueva York, ____, tú fuiste la que implantó las nuevas reglas, no puedo creer que tú misma quieras romperlas.
– Pensé que sería más sencillo – aclaró acariciándome el pecho con sus dedos.
– Recuerda que dijiste que si rompíamos la tercera regla todo se terminaría.
– Ya me arrepentí, mejor olvidémoslas – exclamó tratando de besarme.
– De ninguna manera, me iré a dormir al sillón – dije sentándome en la cama.
– No, quédate… pasaste la prueba – susurró en mi oído.
– Lo sabía, eres increíble, te gusta verme sufrir.
– Por supuesto que no… perdona mis inseguridades.
– ¿Y por qué no?, si tu perdonaste mis actitudes psicópatas, somos tal para cual – aseguré acariciándole la nariz con un dedo.
– Eso parece – señaló sonriendo – hasta mañana.
– Hasta mañana.

Me acosté y la abracé, ____ puso su cabeza en mi hombro, finalmente nos quedamos dormidos minutos después. Muy temprano la llevé a Nueva York y aproveché el viaje para atender algunos negocios. Regresamos por la noche y le conté otra parte de la historia, se sorprendió al escucharla, jamás se imaginó que mi cuerpo no reaccionara ante una mujer y sonrió satisfecha cuando le aseguré que había sido por ella. La dejé en su departamento y después yo me fui al mío, necesitaba desahogarme luego de su pequeña prueba de la noche anterior, así que en cuanto estuve en mi cama, recurrí, cual típico adolescente, a acariciarme yo mismo.

Pasó otra semana en la que no nos vimos por la intensa carga de trabajo que tenía ____, al menos hablábamos por teléfono y nos mandamos mails. El sábado la invité al cine para que se olvidara de tantas obligaciones laborales. Estábamos formados para comprar los boletos cuando se me ocurrió voltear y vi casi al final de la fila a Julieta platicando muy animadamente con Zayn.

– No puede ser – exclamé muy sorprendido provocando que ____ también volteara.
– No tiene porque seguir cayéndote mal, yo estoy contigo, él ya es parte de mi pasado – dijo tomándome del mentón para que la volteara a ver.
–Julieta se merece a alguien mucho mejor que ese tipo.
–Zayn no es malo y ambos se están entendiendo y llevándose bien.
– ¿Tú lo sabías y no me dijiste nada?
– En el evento que te comenté iban juntos, no te dije nada porque Julieta me lo pidió, sabe bien que no lo soportas y quería prepararte antes de decírtelo.
– ¿Así que te aliaste con ella para ocultarme información?, ¿eso no rompe la primera regla?
– Por supuesto que no, la rompería si tú me hubieras preguntado si ellos salían y yo te hubiera respondido que no, el ocultar información no es una mentira, además no podía traicionar la confianza de Julieta ni tampoco me correspondía decirte.
– Siempre logras convencerme y salirte con la tuya – dije abrazándola y frotando cariñosamente su nariz con la mía.
– El hecho de que las cosas entre él y yo no funcionaran no significa que pasará lo mismo con ella, al parecer tienen muchas cosas en común, tú bien sabes que Julieta tampoco ha sido una blanca palomita.
– ¿Y qué paso con la tal Olivia?
– Ya no vive aquí, se mudó de nuevo con sus papás, así que lo suyo terminó.
– Espero que eso sea cierto.
– Por supuesto que lo es, ojala que en un futuro cambié tu opinión sobre él.
– Mientras no la engañe todo estará bien.
– No lo hará, se nota gran empatía entre ambos, Julieta ya me había comentado algo en la boda de Caroline.
– Ahora comprendo porque se emocionó tanto cuando le tocó el ramo

Después de salir del cine fuimos a cenar y me comentó que el viernes siguiente era la fiesta de la agencia, así que quedé de pasar por ella a las ocho a su departamento. Me quedé impresionado cuando la vi salir del edificio, llevaba un vestido morado, largo y recto, de tirantes y con escote en la espalda, el cabello recogido y el collar y los aretes que le había regalado. Me sonrió y nos dimos un ligero beso en los labios, le hice saber lo hermosa que se veía y me respondió que yo también me veía muy guapo. Le abrí la puerta del auto y subió.

Llegamos al lugar del evento, había una gran concurrencia y ____ me estuvo presentando a ciertos invitados, me daba cuenta como se le quedaban viendo algunos tipos y la ira me inundaba, pero sabía que tenía que aguantarme, tenía que recordar la regla número dos, así que respiraba hondo para evitar cometer o decir una tontería que arruinara la noche.

Más tarde un tipo la sacó a bailar, ella titubeó, pero finalmente aceptó, ya que era uno de los dueños de la agencia. Yo me bebí de un trago la bebida que traía en la mano, la otra mano la tenía cerrada en un puño mientras los veía danzar en la pista, el sujeto la miraba de manera lujuriosa, pero, ¿es que ella podría ser tan ingenua de no darse cuenta o simplemente lo estaba pasando por alto?

De pronto una linda chica pasó frente a mí y me sonrió cordialmente, yo le devolví la sonrisa y entonces una idea cruzó por mi mente, si ____ estaba bailando, ¿por qué no hacerlo yo también? Así que me acerqué a la chica, que por cierto estaba sola.

– Hola – dije parándome frente a ella y sonriéndole normal, sin coqueteos.
– Hola – respondió con otra sonrisa.
– Linda fiesta, ¿verdad?
– Sí, aunque la verdad yo vengo de compromiso, mi padre es uno de los dueños y pretende que en algún futuro yo la dirija, aunque a mí lo que en realidad me gusta es la pintura, pero él no lo entiende y me obligó a estudiar mercadotecnia.
– Que mal, uno debe hacer lo que le gusta en la vida, no lo que otros te impongan, aunque sean tus padres, por cierto, soy Tom Kaulitz y tú eres… – dije y le tendí mi mano.
–Larissa Morales, mucho gusto – respondió estrechándola – ojala mi padre pensara igual que tú.
– ¿Y quién es tu padre?, por cierto.
– Aquel señor que anda bailando con la chica de morado – señaló y me di cuenta que era el que bailaba con ____.
– Mira, que casualidad, la chica con la que baila es mi novia.
– ¿____ es tu novia?, no me lo hubiera imaginado, por eso no te dije su nombre.
– Así es, vengo con ella – nos quedamos en silencio unos segundos – ¿quieres bailar? – le propuse finalmente.
– ¿No se enojara ____?
– No tiene porque, no tiene nada de malo, además ella también está bailando.
– Ok, pero cualquier reclamo de su parte, te echaré a ti la culpa.

Asentí con la cabeza, le sonreí y le tendí mi brazo, caminamos a la pista y comenzamos a bailar, de inmediato ____ se dio cuenta y abrió los ojos como platos, lo cual me indicó que los celos la estaban embargando, ella era la que había decidido jugar este juego y poner las reglas, así que ahora le tocaba acatarlas.

Continué bailando con Larissa que estaba un poco nerviosa, pero le dije que se relajara, en tanto yo sentía las miradas asesinas de ____ y cuando nuestros ojos se cruzaban le sonreía sarcásticamente, no podía negar que los celos me estaban carcomiendo por dentro, porque a diferencia de mí con Larissa, ese tipo si tenía otras intenciones con ____, se la estaba comiendo con los ojos, sin siquiera importarle que su hija estuviera presente en el mismo lugar.

Después que la melodía terminó le di las gracias a Larissa y me acerqué a uno de los meseros para tomar una copa de champagne. ____se paró frente a mí y me recorrió la mirada con rabia cruzándose de brazos.

– ¿Te diviertes? – preguntó con sarcasmo.
– Igual que tú – respondí con ironía.
– Eres un cínico Tom, nunca cambiarás, ¿verdad?
– ¿De qué estás hablando?
– Ay no te hagas el inocente, por favor, te vi con Larissa.
– Sólo estábamos bailando, al igual que tú y su papá.
– Ahora voltéame las cosas.
– No te estoy volteando nada, ¿qué te sucede____? – exclamé serio por su actitud.
– ¿A mí?, nada, yo no era la que estaba coqueteando.
– Pues yo tampoco, eres muy injusta ____, me pides que no tenga ataques de celos, pero tú sí puedes tenerlos.
– Yo no te he insultado como tú a mí.
– Ya te pedí perdón por eso, estuve a punto de arrodillarme con tal de conseguirlo, ¿ya se te olvidó?
– Pues si no me hubieras insultado en un principio no tendrías que haber hecho eso.
– Ya te he dicho mil veces que estoy arrepentido, acepté tus reglas para demostrarte lo que siento por ti, yo no soy el que tiene dudas en esta relación, porque desde que te conozco no he hecho otra cosa que locuras con tal de estar a tu lado y sé que cometí un grandísimo error al decirte eso en el aeropuerto, pero creo que he hecho cosas mucho más valiosas que al parecer no tomas en cuenta, te he llevado con mi familia en fechas muy especiales, volé desde Europa sólo para arreglar las cosas contigo.
– Porque me mentiste, lo hiciste para remendar tu error, no volaste porque murieras de ganas de verme.
– Claro, yo soy el malo de esta historia y tú una pobre ingenua que se ha dejado embaucar por mí, ¿sabes algo?, ya me cansé de discutir sin sentido contigo.
– ¿Ahora resulta que esto no tiene sentido?
– Pues no, no lo tiene, desde que te conozco no he estado con otra mujer porque me di cuenta de que sentía algo más por ti, como para que tú dudes de mí a estas alturas de la relación, encima me exiges cosas que tú no estás dispuesta a dar, aceptaste que las reglas fueran parejas – de pronto caí en la cuenta de algo al recordar la noche que dormimos juntos – no me vayas a salir ahora con que esto es otra prueba, porque no sé como reaccione esta vez – se quedó callada y miró al suelo – si esto no funciona será por ti ____ no por mí… no tengo la paciencia.
– Tienes razón Tom, perdóname, no era una prueba, en verdad perdí los estribos, no me gusta verte con otras.
– Tú misma estás rompiendo tus reglas y dijiste que…
– Ssshhh – puso sus dedos sobre mi boca – no lo digas, sé lo que dije y sé que soy una tonta y una insegura, te prometo que no volverá a pasar.
– ¿En qué minuto te volviste así _____?, de las cosas que me gustan de ti es tu seguridad y tu firmeza, ¿qué te está pasando?
– Te amo demasiado, eso es lo que me está pasando, tú te volviste psicópata, yo insegura – respondió pasando sus manos por la solapa de mi saco.
– Enserio eres increíble _____ – exclamé sonriéndole y moviendo la cabeza – no sé que voy a hacer contigo – agregué tomándola del mentón para levantarle la cara.
– La culpa de todo la tienen las hormonas – argumentó haciendo un puchero.
– Supongo que tendré que acostumbrarme a lidiar con eso.
– Algunas veces… ¿me perdonas?
– ¿Cómo no perdonarte si pones esa carita? – aseguré acariciándole la nariz – pero en verdad, no merezco que me hagas estas cosas ____, no es justo que dudes de mí después de todo lo que he hecho para que estemos juntos.
– Lo sé, mejor ya vámonos para que me sigas contando.
– ¿Segura?, apenas hemos estado un par de horas.
– Sí, no es necesario que estemos más tiempo y lo que ahora me importa más es estar a solas contigo.
– De acuerdo, vámonos.

No hablamos mucho en el camino, creo que cada uno iba analizando lo que había sucedido, me dolía que ____ se pusiera en ese plan, pero también debía entenderla, supongo que no es fácil estar tanto tiempo con la misma persona y un día darte cuenta que ambos tenían a alguien más, algo que quizá jamás habían contemplado y si a eso le aunamos que yo no había sido un santo antes de conocerla, hasta cierto punto era normal su actitud, aunque eso de ponerme pruebas si era una exageración, claro que aún no terminaba de contarle mi versión de los hechos, tal vez cuando lo hiciera se le quitaran los temores y las inseguridades.

CAPITULO # 71 (FIN DEL MARATOM)


Llegamos a su departamento y nos sentamos en el sillón, ____ fue por unas sodas a la cocina y después regresó a mi lado y le conté otro poco de mi historia.

– ¿De verdad nunca consideraste dedicarte a la actuación? – preguntó levantando una ceja.
– No, siempre me gustaron los negocios.
– Es una lástima, en serio que eres un gran actor, jamás me imaginé que te hubieras puesto celoso el día del partido.
– Bueno, no los sentí tan intensos como en las ocasiones posteriores.
– Y yo pensando mal de Julieta y ni al caso.
– En ese aspecto jamás te he mentido, desde un principio te dije que sólo era mi amiga.
– Lo sé, pero, ¿cómo no querías que pensara mal si como se llevaban?, sobre todo el día que llegamos a Las Vegas.
– Eso te lo contaré mañana, ahora debo irme porque ya tengo sueño, el champagne ya me está haciendo efecto.
– Quédate, te prometo que no más pruebas, además, aunque quisiéramos hoy no podemos, estoy en mi período.
– Está bien corazón, me quedo.

Nos preparamos para dormir y de nuevo nos acostamos abrazados. A la mañana siguiente desperté y ____ no estaba a mi lado, me levanté al baño y al salir ya me estaba esperando con el desayuno.

– Buenos días mi amor – dijo y me dio un beso en los labios.
– Buenos días corazón.
– Ahora me toca consentirte, me levanté muy temprano a prepararte el desayuno, hice pancakes.
– Gracias, no tenías que hacerlo.
– Claro que sí, tú ya has hecho mucho por mí, es justo que yo te lo retribuya.
– Me conformo con saber que me amas como yo a ti.
– Eres tan bueno Tom, a veces siento que no te merezco.
– No digas eso, sólo tienes que controlar tus hormonas, no quiero ni imaginar cómo te pondrás cuando estés embarazada.
– Me asusta, aunque no lo creas, ¿me tendrás paciencia?
– Por supuesto, te amo.
– Yo te amo también y mucho.

Nos besamos por unos minutos y después nos sentamos en la cama a desayunar mientras veíamos la televisión. Después ella se bañó y en tanto se vestía yo me bañé también. Cuando estuve listo la abracé por la cintura.

– ¿Qué te parecería ir a andar en bicicleta?
– Me encanta la idea, hace mucho que no lo hago, creo que ya hasta se me olvido.
– Lo que bien se aprende jamás se olvida.

Le di un beso en los labios y después salimos del departamento. Fuimos a un parque cercano donde rentan bicicletas e iniciamos un recorrido, al principio le costó un poco de trabajo, pero después hasta me ganó en una competencia que hicimos. Ambos nos reíamos y estábamos explorando una nueva faceta de nuestra relación, me encantaba que se diera cuenta que no sólo éramos compatibles en el sexo, sino en muchas otras actividades y que definitivamente no era ese el aspecto que nos unía, a pesar de que así hubiera empezado lo nuestro.

Después compré un par de helados y nos sentamos en una banca a comerlos mientras veíamos a la gente que pasaba. Empezamos a contarnos anécdotas de nuestra infancia y nos reíamos como un par de niños, de repente se puso seria y triste, puse mi mano sobre su rostro y le acaricié su mejilla con mi dedo pulgar.

– ¿Qué te sucede corazón? – pregunté preocupado.
– Me acordé de la última vez que mis padres me llevaron a andar en bicicleta.
– ¿Quieres contarme?
– Sí, tenía cinco años y apenas había aprendido a sostenerme sin las ruedas de soporte, mi papá fue a comprar unas paletas y mi mamá se distrajo porque un hombre le preguntó la hora, yo tomé demasiada velocidad y no pude frenar así que me estampé contra un árbol, me abrí la ceja y me fracturé la muñeca, me puse a llorar y a pesar de eso y del dolor me di cuenta como ellos discutieron y se reprocharon el uno al otro por no estar atentos en mí, tres días después mi mamá me dijo que mi padre ya no viviría con nosotros, todavía lo recuerdo bajando las escaleras cargando una maleta, me abrazó y me aseguró que me quería y que eso no tenía nada que ver conmigo, aunque en ese momento yo pensaba que sí, las cosas ya no volvieron a ser iguales, Mi mamá se volvió amargada hasta que años después conoció a su esposo actual, entonces empezó a comportarse como una adolescente y por eso decidí irme a vivir con mi papá, a quien sólo había visto cada quince días los años que viví con ella.

La abracé fuertemente, ella hundió su cabeza en mi pecho y empezó a sollozar, le acaricié su espalda, me afligía tanto verla así, no tenía idea de cómo había sido la separación de sus padres y debió haber sido terrible para ella pensar que tenía la culpa, cuando en realidad había sido porque se les acabó el amor de pareja, tal vez por un mutuo descuido. 

– También por eso tengo miedo, no quiero pasar por lo mismo Tom, no quiero tener que explicarle el día de mañana a mis hijos porque su padre y yo no estamos juntos, no quiero ser juzgada ni tener una familia rota.
– Mi amor, a nosotros no nos va a pasar lo mismo – le aseguré separándome para tomar su rostro entre mis manos – nunca permitiré que nuestra relación se enfríe, te conquistaré día a día durante toda la vida, aunque tenga 80 años, siempre te voy a cuidar y a amar.
– Yo también a ti – puso su mano sobre mi mejilla – ayer tuviste tanta razón al decirme egoísta, una relación es de dos y ambos tienen que poner de su parte para que funcione, he sido una tonta todos estos días, exigiéndote cosas que no debía, imponiéndote reglas absurdas sólo por justificar mis temores y tú sí has sido un santo, aceptando sin chistar mis idioteces, hasta que ayer logré sacarte de tus casillas y con toda la razón del mundo.
– No son tan absurdas tus reglas, sólo la tercera, esa sí lo es y mucho – ella se rió y me sentí feliz de haber logrado ese objetivo – tú tuviste mucha razón al pedir sinceridad, te había ocultado muchas cosas, también por miedo, sé muy bien que invadí tu privacidad, que hice cosas nada honorables como hurgar en un celular que no era mío, propiciar “encuentros casuales”, como si fuera un mafioso y en cuanto a los celos, era más que justo que me pidieras que no tuviera esos ataques.
– Yo tampoco debí haber tenido el de ayer, las reglas eran para ambos y yo la rompí.
– Ya te penalizaré por eso – dije con una sonrisa.
– Y con justa razón, aceptaré el castigo que me impongas.
– Cuando lo decida te lo haré saber.

Le besé la frente, la nariz, la comisura de sus labios y luego nos unimos en un beso apasionado, el estruendoso ruido de un trueno hizo que rompiéramos el beso y ____ se aferró a mí como si de un salvavidas se tratara

– ____, dijiste que no más pruebas.
– Esto no es una prueba – aseguró mirándome a los ojos.
– ¿Estás pretendiendo romper otra regla? – pregunté arqueando una ceja.
– No la estaría rompiendo… al 100%, no lo haremos en sí, sólo… – respondió sonrojada.
– El oral también es sexo, ____– le aclaré sonriendo.
– Déjame retribuirte tu comprensión, tu paciencia y tu sinceridad.
– No necesitas hacerlo.
– Claro que sí, has sido demasiado bueno conmigo y yo demasiado egoísta contigo, yo también debo poner de mi parte para que esto funcione, no tiene porqué haber más reglas entre nosotros.
– ¿Estás segura?, aún no terminó de contarte toda la historia.
– Estoy segura, lo que sigue ya lo conozco, casi en su totalidad, ahora déjame hacerte feliz – dijo acariciando mi mejilla.
– No quiero que después te arrepientas.
– No lo haré, olvida las reglas, ya me has demostrado suficiente, es hora que yo lo haga también, te amo Tom y quiero comprobártelo.
– Yo también te amo, muchísimo.

Me sonrió y volvió a apoderarse de mi cuello, besándolo, lamiéndolo y succionándolo al tiempo que metía su mano por debajo de mi camisa para acariciar mi torso, yo eché la cabeza hacia atrás, mientras sentía como el calor me iba invadiendo. ____ me quitó la camisa y comenzó a lengüetear uno de mis pezones, un jadeo brotó de mis labios, había echado tanto de menos sus caricias, mi cuerpo la necesitaba con urgencia, sentía como el pantalón se volvía una cárcel para mi miembro. Puse las manos sobre la espalda de ella, pero se separó.

– No, esto es sólo para ti – reiteró mientras enlazaba sus manos con las mías.

Con sus labios y su lengua fue recorriendo cada centímetro de mi abdomen en tanto mi respiración se elevaba hasta el cielo y el pantalón se había convertido en un verdadero estorbo.

– _____… ya no… soporto – dije con dificultad.



Hola!!! como estan? Una disculpa por no haber agregado ayer, lo que pasa es que tenia que estudiar para unos examenes que tenia hoy y pues ... no tuve tiempo, y Hoy agrego hasta esta hora porque tuve muchas cosas que hacer durante el dia en mi casa y no tenia tiempo pero aqui estan los caps ... Chicas en la proxima actualizacion se acaba la historia :( lo se, es triste pero ya ni modos :)) seran los 4 caps mas el epilogo ... Espero y les guste los caps y tambien espero ver comentarios :) el lunes se acaba asi que ... PREPARENCE xD ... Bueno me despido y que esten muy bien ... hasta pronto :))

3 comentarios:

  1. Nooo quiero q se acabe la fic :( bueeh todo llega a su fin :s me encanta esta fic es una de mis favoritas.. :O q romantico es Tom los caps estuvieron muy intensos pero me encantoooo y ojala (Tn) quede embarazada de Tom siguelaaa xfiis ya me muero x leer los últimos caps q quedan :( (Tn) y Tom están super enamorados!!!!

    ResponderEliminar
  2. Aaawwwwww ~!!!!! que mal que se acabe :( pero bueno :/ y en cuento al cap!! OOH DIOS !!!! estos pleitos wow *-* estan perdiendo el contro el todo D: espero que no haya mas asi ._.

    ResponderEliminar
  3. Ahora sii con las reglas superadas!!
    Amo tus focs.. Wauuu ya terminara..

    Espero subas pronto ;)

    ResponderEliminar